VENEZUELA Y EL COMPLEJO PANORAMA EN 2025
“El régimen venezolano
tiene una obsesión por las elecciones.
Perdió la última e insiste en convocar y perder otra. No han reconocido ninguna
de las dos derrotas. Creen que ese disfraz democrático le borra la faz de
dictadura. Sus mentiras le han hecho perder a su pueblo” Carlos Pérez Ariza. Tierra de Gracia: Mentiras, secuestros y
abstención sin compasión” El
Nacional. Mayo 27. 2025
“Organización,
organización, porque al final esta es una lucha que se está dando dentro del territorio y con
ayuda, por supuesto, internacional para crear un cerco y estos criminales que
están dentro del territorio se vayan quedando sin la fuerza ni los recursos y
todo lo que representa un Estado criminal. No crean eso que ya el
mapa esta rojo, haciendo creer una mayoría que perdieron hace tiempo. Lo que saben es robar, mentir, secuestrar,
asesinar, encarcelar. Y este sistema criminal no puede ser normal ni con la
Iglesia, ni con el empresariado honesto, ni con toda la sociedad. Es un sistema criminal amoral, sin
principios, sin ética. Después del 28 de julio no hay Estado de Derecho, es un régimen totalitario que simplemente
por la vía de la fuerza acaba con el que no lo reconozca…” Magaly Meda. Dirigente
en el exilio de VENTE VENEZUELA. Entrevista con César Miguel Rondón. En
Conexión. 27 de mayo de 2025.
“La política de un
país autoritario se estructura de un
modo muy primitivo: O se está a favor del régimen o en su contra. El resto
de opciones políticas ha quedado completamente suprimidas” Alexéi Navalni. Tomado de PATRIOTA. MEMORIAS. 1era edición Buenos
Aires. Ariel 2024
Un cuarto de siglo llevamos los venezolanos en
este conflicto que parece irresoluble porque mientras más se les demuestra que
no tiene gente, que son una ínfima minoría, más se atrincheran en el poder, más secuestran y reprimen a la
población llegando a cometer actos criminales para oficializar el Terrorismo de
Estado. Y la pregunta que se hace mucha gente, ¿Si están tan débiles, desacreditados a nivel mundial y sin respaldo
popular, porque se mantiene? Son varias
las aristas que los sostienen y mientras no haya un sisma o algo que
provoque su caída, el sistema criminal que han creado no estallará en mil
pedazos, bien desde adentro hacia afuera o lo contrario, o de manera conjunta.
Son capacidades de maniobra o recursos que han venido utilizando, que le alargan la vida a la moribunda
dictadura.
Por una parte el
sistema clasista o de sectores sociales está fragmentado y roto. Desde las capas sociales populares solo les queda una minoría que
agencian el llamado sistema comunal en los barrios y que por lo general son
vistos como soplones, sapos, arrastrados de la dictadura. En las capas sociales medias y altas, solo
les quedan los llamados enchufados, empleados públicos incondicionales
temerosos y aquellos que dicen no
meterse en nada para cuidar su trabajo, empleo y empresa. También están los que
han vendido su conciencia a cambios de dadivas y limosnas de Estado. Aquí hay un amplio sector parasitario, que por herencia
viene del populismo clientelar de la llamada Cuarta República. Se nota una
pobreza cíclica que se reproduce y por
eso es que las amplias mayorías han entendido el mensaje contundente de María Corina Machado de progreso y libertad, antagónico al mensaje del
Chavismo-Madurismo de socialismo y antiimperialismo, que en la
realidad se traduce en más
pobreza, miedo y control social. Ya
tiene 25 años tratando de convencer a la población y han fracasado, tanto por
sus políticas empobrecedoras como el sostenimiento de la represión para callar
las protestas.
La hegemonía política,
administrativa, judicial, legislativa, policial y militar
se ha sostenido medianamente cohesionada y es quizás la que más cuida el
eje del poder Maduro-Cabello-Padrino-Rodríguez
y el laboratorio cubano/ruso porque
es la que debe inspirar autoridad, vigilancia y
dominio hacia abajo. Concretamente
hacia las gobernaciones, alcaldías, corporaciones estatales/económicas, empresas
del Estado, poderes policiales de los Estados, etc. Con las recientes
elecciones de la Asamblea Nacional y de Gobernadores se buscaba oxigenar y recomponer el Poder Legislativo Nacional y de los Estados, sin lograrlo porque la
gente no se movió de sus domicilios, la soledad de las calles era total. Solo
un 15 a 20 por ciento, lo cual demuestra el rechazo a esta farsa tramposa, aun
con la represión desatada agregando más de 80 presos políticos a la ya abultada
cifra. La conseja ruso/cubana es que
para los planes de “La Revolución” eso de soberanía popular y democracia no
existen, son un estorbo que hay que
ignorar y más si la coyuntura lo exige. Estamos en presencia de toda una
institucionalidad cuasi democrática que
tiene como principio la lealtad absoluta
a un Poder Ejecutivo diseminado o repartido en ejes de poder y cuyo sostén visible es la represión más bárbara que
no se conocía sino en los tiempos de la dictadura gomecista, aunque cabe
destacar que este poder totalitarista criminal
es de origen ruso-chino-cubano.
Otro elemento de sostén
del Sistema Criminal, es la hegemonía político-partidista. En veinticinco años han logrado
construir una estructura política
monolítica, cohesionada en torno al Partido
Socialista Unido de Venezuela (PSUV), vertical
y absolutista. Especie de Comité Central que baja las líneas de ejecución a
través de sus cuadros y funcionarios
públicos de alta confianza. Es toda una
red que parte de Miraflores y se despliega por las instituciones de Estado,
gobernaciones, alcaldía y los llamados consejos
comunales. De igual manera esas líneas estratégicas deben ser
obedecidas por los mandos militares, policiales y de seguridad en la función
represiva y de control social. Pero no están
solos. Han venido penetrando en las organizaciones políticas y en las
pasadas elecciones del 25 de mayo de 2025
quedo suficientemente demostrado en su afán divisionista, han habilitados
viejos líderes, como el caso de Henrique
Capriles, Stalin González, Luis Emilio Rondón, Timoteo Zambrano, Tomas Guanipa,
Felipe Mujica Henry Falcón, Luis
Florido, Bernabe Gutiérrez, entre otros. Entregándoles
17 curules de diputados bajo pactos de convivencia frente a una aplastante mayoría oficialista. Son especies de premios de consolación para
aparentar democracia parlamentaria. Si bien es cierto que esta estrategia
la han usado en los anteriores procesos electorales, hoy se observa desgastada
y no convenció al electorado que se plegó al llamado de no votar, exhorto que hizo María Corina Machado Juan
Pablo Guanipa desde la clandestinidad y otros líderes dentro y fuera del país. La pregunta del día es ¿Por qué la gente dejo de votar de manera
abrumadora? Aparte del fraude descarado del 28 de junio de 2024 que está
fresco en la memoria de los venezolanos, está el hecho que la población
comprendió que el problema no está en una Gobernación o en la Asamblea
Nacional, porque a la final en Venezuela
no hay democracia, no se respetan los resultados y además que esas estructuras
legislativas y/o autoridades regionales carecen de autonomía, son cascarones vacíos
que han sido despojados de legitimidad
soberana, que alguna vez tuvieron.
Articulado a lo
anterior, en el campo internacional tenemos que la dictadura
de Nicolás Maduro, no tiene respaldo de países democráticos; no cuenta con la
capacidad de inversiones extranjeras que promuevan la economía y el empleo productivo;
es acusada de cometer crímenes de lesa humanidad desde
2014 hasta nuestros días en la Corte Penal Internacional; recibe
condena internacional en la Organización de Estados Americanos (OEA), en las Organizaciones Internacionales que
defienden los Derechos Humanos y en Organización de Naciones Unidas (ONU). Lo más reciente, la suspensión
por parte del gobierno norteamericano de la licencia petrolera a CHEVRON para exportar petróleo, con
el justificativo del gobierno de los
Estados Unidos de no alimentar una dictadura criminal y ejercer presión hacia el camino
de la transición democrática, etc. Sin embargo todavía la sangre no llega al
rio. En la América Latina tenemos un grupo de países que por afinidades
ideológicas o simplemente para evitar meterse en problemas son incapaces de
tomar medidas unitarias o individuales para cercar la dictadura venezolana. Colombia, México, Brasil, Perú, Bolivia, Honduras, Uruguay, entre otros, son indiferentes al drama que están sufriendo
millones de venezolanos, tanto adentro, como los miles de migrantes que estás
instalados en sus países, huyendo de la dictadura o por seguridad alimentaria. Unos
por afinidades ideológicas y otros por no buscar problemas. Ecuador,
Chile, Panamá y Guatemala la condenan pero son incapaces
de promover una declaración conjunta para cercar la dictadura. Mención aparte
merece Argentina quien coopero con el
operativo “GUACAMAYA” en la
extracción de la Embajada de Argentina de los cinco venezolanos, que la
dictadura tenía presos en condiciones hostiles y negando el salvoconducto que
legalmente les correspondía. Además el gobierno de Javier Milei a través de su Ministros de Relaciones Exteriores ha
impulsado una condena internacional y un
exhorto a una intervención promovida por la
ONU y la OEA para aislar y acabar de
una vez por todas con esta dictadura criminal. Como podemos ver el proceso diplomático y de
medidas drásticas es demasiado lento mientras la dictadura mantiene en las
cárceles a casi 900 presos políticos, mujeres,
hombres, militares disidentes, menores de edad y adultos mayores y no
cede ante el clamor y protesta ciudadana. Le
basta todavía el apoyo que tiene de regímenes
dictatoriales, aunque no le den dinero, como es el caso de Rusia,
Corea, China, Siria, Cuba, Nicaragua, etc. Cabe mencionar que Putin planteo recientemente crea una “zona de seguridad” con sus países
satélites del Continente Americano, como lo son Cuba, Nicaragua y Venezuela ante una posible intervención
extranjera.
Frente a este panorama, tanto como yo, como muchos, se estarán preguntando ¿qué es lo predecible y que resulta ser lo contrario, es decir lo impredecible? Lo predecible es que estamos frente a una crisis de carácter estructural que hace aguas por todos lados y que el Sistema Criminal, asaltante del Estado y sus instituciones, no tiene capacidad de resolver utilizando la violencia y la represión más primitiva contra todo un pueblo, además de su ineficacia absoluta, porque resulta imposible gobernar a un país de 30 millones de habitantes con una estructura corporativa corrupta que se ha repartido el botín del Estado. En segundo lugar un país sometido a más de dos década con servicios públicos decadentes, una educación sin presupuesto y un sistema de salud sin laboratorios ni médicos, sin empleos y sometidos a dadivas de bonos y bolsas de comida temporales. Un país que ha destruido su economía y se sostiene con la exigua renta que al final solo sirve para mantener una estructura clasista de enchufados y una burguesía parasitaria y partidista. Mientras que las grandes mayorías se ven obligadas a emigrar o vivir y morir en la miseria. Venezuela, gracias a estos piratas delincuentes en un barco que se hunde. Lo impredecible es que a ciencia cierta no sabemos cuándo se terminará de hundir el barco y que capacidad de maniobra le queda al tirano y sus acólitos. Lo impredecible es que no sabemos que se puede estar maquinando dentro de las propias estructuras internas del poder secuestrado que produzca una irrupción, especie de desencadenante que acabe con el sistema podrido y de terror que lo sostiene, como sucedió en la vieja Unión Soviética y la perestroika de Mijail Gorbachov . Lo predecible es que en este siglo XXI no va a venir ninguna inversión extranjera capitalista a invertir en un país quebrado, sin una economía sana y un país cuya población más bien quiere huir del territorio, además que no hay reglas claras por la inestabilidad política y social. Lo impredecible es que no sabemos la capacidad de aguantar de la población ante esta crisis creada, del crecimiento de los conflictos por la diáspora venezolana y sus consecuencias, como es el caso más reciente de los deportados de los Estados Unidos. Lo predecible es que continúen las amenazas y persecuciones contra todo aquel que disienta y vemos que falta poco para llegar a los 1000 presos políticos, sin contar la fatídica estadística de asesinatos, torturas y atropellos que tiene en su historia esta dictadura de tendencia fascista. Sabemos que esto al final no va a resolver el problema a pesar que pueda venir momentos de calmas silenciosas. El pueblo tiene memoria y se guarda para sí el momento del tumulto, de tomar las calles y no regresar hasta no lograr su objetivo, que no es otro que conquistar la libertad y la justicia. Lo impredecible es que hay un malestar internacional donde Los Estados Unidos y otros países quieren ponerle fin y se están alineando en objetivos de liberación, pero no se sabe el momento y la hora final. Lo predecible es que hay un liderazgo, dentro y fuera del país, que se la está jugando todas y que está dispuesta a llegar hasta el final.
Termino este articulo con una extensa cita del politólogo e historiador venezolano Nelson
Chitty La Roche, publicado en EL
NACIONAL del 30 de mayo de 2025 titulado “Legalidad y legitimidad: Notas sobre la dicotomía en la Venezuela de
hoy.
“¿Legalidad? Ninguna. Comicios oscuros desde su anuncio intempestivo, su organización discriminatoria y plagada de opacidades y con una participación más que precaria. Ni legal, ni legitima ni democrática. Solo les queda el rostro de la mentira cínica, del poder impuesto por las armas, de la represión, de la anti política, de la injusticia, de la miseria humana, de la pobreza espiritual, del autoritarismo, de la prevalencia de la mediocridad, de la oscuridad, del deterioro antropológico y, sin embargo, resalta una conclusión: solo ese pueblo hoy sometido y desfigurado puede alumbrarse nuevamente como pueblo libre. Nadie, que lo quede claro, lo hará en su lugar”