MERLYS OROPEZA Y GABRIEL SARMIENTOS: DOS
CASO DE CRIMINALIZACION EN LAS REDES
“La Ley Contra el Odio y la Tolerancia
Pacífica es una norma desproporcionada que viola principios fundamentales de la
Constitución Nacional. La redacción de esa Ley es bastante ambigua y sobre todo ese Artículo 20 que establece la
promoción e instigación al odio, porque
cualquier mensaje en redes sociales y en
el estado de Whatsapp puede ser criminalizado, según el criterio
subjetivo del juez, porque facilita que su uso sea una herramienta de
persecución política”.
Doctor
Joel García. Abogado penalista. 23 de junio de 2025.
“Estamos
cundíos de funcionarios delincuentes, que trabajan con delincuentes
comunes…Tengo a personas que pertenecen a la Brigada Motorizada de la Policía
del Estado Aragua y están comentando, a través de los grupos policiales, que se están organizando para
joderme, para sembrarme… Estas prácticas se están realizando en contra de mi
persona desde hace rato. El Fiscal Superior del Estado Aragua, a pesar de mis solicitudes, no me ha
dado ningún apoyo. Así que lo ligo al
Tren de Aragua” Influencer Gabriel Jesús Sarmientos.
22 de junio de 2025.
Cuando yo pierda el asombro/ cuando no me duela lo que le sucede a mis
compatriotas en Venezuela/ cuando no me cause asco esos tipos que gobiernan a
mi país/ cuando su crueldad criminal no
me mueva las fibras de mi conciencia/ cuando sea indiferente/ ese día estaré muerto. Angel Gustavo Cabrera.
El fenómeno de las redes sociales
tiene un gran atractivo, nos permite dar a conocer lo que sentimos de manera
sincera y transparente. Sirve para denunciar, para alertar, para informar, para
hacerse sentir, escribiendo algo que muchas
veces es voz populi ya se dice. En
una sociedad democrática esto es común y debe ser tomado en cuenta por los organismos competentes para mejorar
sí hay una denuncia seriamente y si vale
la pena. Pero cuando las reglas del juego democráticos son alteradas y
esos programas sociales se usan para la sumisión y control político, entonces
la libertad de expresión, como lo establece claramente el Artículo 57 de la Constitución de la República, es ignorada y cualquier opinión personal, cualquier humor negro, o
escribir algo que se ha dicho muchas veces, puede ser criminalizada, como sucedió con
estos dos casos, el de Merlys Oropeza y el de Gabriel Jesús
Sarmientos. Son dos casos diferentes en cuanto al uso de las redes, unidos
solo por la juventud de ambos. Merlys
Oropeza condenada injustamente a diez años de prisión y Gabriel Sarmiento, vilmente acribillado a balazos en la madrugada
del lunes 23 cuando salía de su habitación porque le estaban tumbando la puerta,
estaba despierto transmitiendo mensajes por TikTok en vivo como Influencer, con más de 70.000 seguidores. Las dos noticias hicieron estallar
las redes el pasado lunes 23 de junio. Veamos cada caso por separado, y al final que cada quien saque sus propias
conclusiones.
La joven MERLYS
OROPEZA de aproximadamente 25 años de edad publicó por Whatsapp y post en Facebbok un mensaje criticando a la jefa del Consejo Comunal de su comunidad de fecha 29 de julio de 2024, la
cual textualmente decía: “Y estas son
las palabras de la jefa del clap de la carolinas calle 4, que triste ver
personas que prefieren la bolsa de gorgojos a un futuro para sus hijos” (con un stiker de un corazón roto). Por
este contenido fue denunciada por la jefa
del Clap y chavistas por considerarlo ofensivo. Así que fue detenida once días después en el
contexto de la derrota electoral presidencial del 28 de julio, 2024 y el
fraude que tuvieron que inventar para no reconocer a Edmundo González
Urrutia como Presidente Electo. No bastándoles con eso querían más, asesinaron a opositores, persiguiendo a testigos electorales, encarcelando a
dirigentes nacionales con expedientes inventados, etc. Es en ese contexto que
once días después detienen a Merlys Oropeza por un simple mensaje
de Whatsapp, ante una denuncia de la Jefa del CLAP.
Sostiene el abogado penalista Joel García que
“hay delitos muchos más graves
como la corrupción que atentan contra el Patrimonio de la Nación, contra
la transparencia y honestidad de la administración pública y tiene penas muchos
menores que esa condena a la joven
Merlys Oropeza. Ningún mensaje en redes sociales debe ser castigado con diez años de prisión sin haber ni
siquiera violencia física”. En todo caso un llamado de atención bastaba
para “corregir la conducta de la joven si es que había una falta. ¿Qué quiso decir la joven? Que debería preocuparse más por el futuro
de sus hijos que arrodillarse o vender
su conciencia por una bolsa de comida con coquitos. En todo caso la Joven
tiene el derecho a expresar su opinión y en todo caso citarla al Concejo
Comunal con el Juez de Paz para que
explique el contenido de su mensaje,
hacerle un llamado de atención y explicarle el programa y contenido de la bolsa
del CLAP, cerrando el caso en paz. Además es imposible criminalizar por una
supuesta ofensa cuando todo el mundo sabe que esas bolsas alimentarias han perdido calidad y
cantidad de lo que se reparte temporalmente. Allí no hay ninguna ofensa ni lenguaje
vulgar o grosero.
Merlys Oropeza,
una señorita sin antecedentes penales, de familia decente, sometida nada más y nada menos que a La
Ley del Odio y la Tolerancia Pacífica. ¿Cómo puede sentirse?: devastada,
muerta en vida. Un lugar inhóspito, lúgubre, con nueve meses encarcelada y ahora
el Tribunal Tercero de Juicio de Maturín
la condena a diez años por el delito de “incitación al odio” sin presentar
fundamentos probatorios claros. Como se puede sentir ese juez que dictó esa
horrorosa y cruel sentencia, a sabiendas que está cometiendo una injusticia destruyendo la vida de esa joven sana y
normal, un juez sumiso a decisiones
superiores.
Lo peor es que días antes les había escrito a
sus padres una carta que deja
mucho que decir de su estado de ánimo,
reduciéndola a la nada:
“Mami y Papi. Con mucha nostalgia y
tristeza te escribo esta carta porque siento que todo lo que diga no alcanzará
a reparar el daño que les he hecho pasar. Estoy aquí en este lugar oscuro,
encerrada nos solo en cuatro paredes, sino por el peso de mi culpa y mi
tristeza. Y aunque intento encontrar
sentido a la verdad no la consigo, ya no me quedan ganas de seguir. He
estado dándole vuelta a todo desde que caí en esto. Cada segundo me golpea la
conciencia y en cada uno de esos golpes están ustedes. Sus rostros, su dolor,
sus noches sin dormir, su decepción y eso es lo que me destroza. Saber que ustedes me dieron todo, que me
amaron incluso cuando no lo merecía. Son quienes más han sufrido por mis
errores, me siento como un peso en sus vidas, una carga, he hecho todo mal ¡TODO!
y lo que me duele es que arrastre su
amor a mí a este infierno. Estoy
rota, Mamá, estoy vacía, Papá. Ya no me quedan fuerzas para levantarme cada
mañana entre estas paredes sabiendo que lo único que he hecho es fallarle, no
encuentro razones para seguir viviendo, porque siento que los grité demasiado.
Cada lágrima suya es por mi culpa, que cada día que estoy aquí ustedes también
lo viven como una condena.
No quiero que me vengan a ver con esa
tristeza en los ojos. No quiero que me sigan esperando con esperanzas cuando yo misma me he rendido. Solo quiero
pedirles perdón por haber arruinado mi vida y la ustedes con ella. Perdón por
todo lo que les hice pasar, por todo lo que han tenido que aguantar por mi
causa. Ustedes merecen paz, alegría, merecen una hija que les devuelva el amor que
le ha sobrado. Y yo ya no sé si tenga fuerza para ser esa hija. Ya no sé si tenga fuerza para seguir respirando.”
Merlys.
Quise reproducirla completa porque es
un testimonio de una época que se ha ensañado contra nuestra juventud que desea
expresar lo que siente. Esa opinión de
Merlys es un horror criminalizarla.
Es patético su estado de ánimo por el suelo, el sentimiento de culpa que
reitera por hacer sufrir a sus padres sin razón alguna por expresar una
opinión, y lo peor que es cierta, las políticas hambreadoras del regimen no
desarrolla el bienestar de una familia ni de un país. Esas bolsas son pan para hoy y hambre para mañana, y además es el
regimen chavista madurista el responsable por la destrucción de la economía
venezolana en 25 años que llevan en el poder. Esa jefa del CLAP, ese Tribunal de
Maturin, el Ministerio Público y el Presidente ilegitimo, serán los responsables de lo que le pueda
pasar a Merlys Oropeza. El otro
asunto que hay que considerar es la volatilidad de los mensajes que se publican
por las redes sociales, son tantos que su impacto y duración es de muy corta
vida. Se esfuman tan rápido que no amerita ninguna pena. ¿De dónde salieron
estos abogados? ¿Cómo llegaron a ser jueces? Al final lo que son unos
verdaderos verdugos al servicio de la dictadura.
Por su parte el joven Gabriel Jesús, de 23 años de edad, residente en el Barrio El Piñonal
Edo. Aragua es un influencer con más de
70 mil seguidores que se dedicaba a subir videos a TikTok habitualmente
sobre la corrupción del régimen y como existía
un vínculo entre las bandas criminales
como el Tren de Aragua y las Fuerzas
Policiales. Gabriel Jesús denunciaba
a las bandas gansteriles como el Tren de Aragua y el Tren del Llano porque extorsionaban
a los comerciantes trabajadores, reclutaban muchachos para llevarlos por mal
camino y demás delitos. Pone la denuncia ante la Fiscalía Superior de
Maracay y ante los Organismos policiales, y solicita protección. La respuesta fue que se lo llevan preso, lo
molieron a palo los mismos presos, lo
intentaron asesinar por ser “sapo” y lo soltaron posteriormente a ver si cogía
escarmiento.
Veamos la transcripción de uno de los videos más importantes, transmitido
en vivo por TikTok:
“Hola, mi nombre es Jesús Sarmiento
Rodríguez, Cédula de Identidad No 27.654.015. Este video es para denunciar
al Ciudadano Andrés Abat Castillo y al ciudadano Rick John Zerpa González,
quien está escribiendo en Twiter amenazando a mi persona. El día de hoy
vinieron personas del Departamento de Investigación Penal a mi vivienda. Y les
hago responsable nuevamente de cualquier cosa que me pueda pasar. Me quiere
extorsionar y me quitó un vehículo. Y se ha estado paseando por los Comandos
Policiales diciendo que no se me preste atención porque yo tengo esquizofrenia,
cosa que es un delito de injuria, articulo 444. Además lo que publicó en twiter cuando yo estuve preso diciendo que
bueno que este preso. Eso está en mi expediente de la calle Páez. Denuncio
a la Fiscal Maurelis Jaramillo Crespo, que se encuentra en la Fiscalía Superior
y le pido a la abogada Katy de la Unidad de la Víctima que por favor tome en
cuenta los archivos que yo dejé en el Ministerio Público y se la haga llegar al
Fiscal, creo que se llama Frank Gabriel, de Aragua. De acuerdo a que yo he estado desde abril pisando el Ministerio Público
y hasta los momentos no me han dado el recurso de Protección
a la Víctima. (…) Aquel que quiera meterse en un problema, ya sea
funcionario policial o del Departamento de Investigación Penal, bueno sigan
delinquiendo, sigan persiguiéndome, que yo
estoy anotando todos sus nombres y pronto los veré, pero los veré de la manera legal porque ustedes están para
servil y proteger, no para extorsionar y apoyar delincuentes como el Niño
Guerrero, Rick Zerpa, Andrés Abascal, Abad Castillo. De verdad que estoy
decepcionado del Departamento de Investigación Penal y del DCDO que se encuentra
en Ciudad Socialista de Palo Negro. Estos son los sicarios de los delincuentes,
específicamente el jefe del DCDO Angel
Palma, el funcionario William Adalejo, el primer oficial Millán y su compañero Gabriel. Necesito que les
abran una investigación de manera inmediata a estos ciudadanos, por estar
asociados para delinquir con el Tren de Aragua y el Tren del Llano. ES
URGENTE”
Se puede notar un vivo interés
valiente por atacar a estas bandas de delincuentes, buscando la tranquilidad
ciudadana, el respeto a las personas y su propiedad y lo que se dediquen.
Lamentablemente por su pasión, su inexperiencia, su juventud, su temeridad, no calculó los riegos que corre con
denuncias como esta, sabiendo que ni siquiera se puede confiar en el Sistema de
Justicia Venezolano, distorsionado y
pervertido como está.
Cito al periodista Daniel Lara Farías, con el cual estoy en desacuerdo en
muchas cosas, pero en esta apreciación coincido: “Yo no voy a re victimizar a Gabriel, pero el joven tenía que entender que no es el Tren de Aragua ni
el Tren del Llano, es el Tren de
Miraflores, el Tren de Chávez, con distintos vagones, es decir el Tren de
Aragua en un vagón, el Tren de los Llanos Otro vagón y la locomotora está en
Miraflores. Entonces a mí me preocupa que siendo el chavismo una organización criminal,
la gente va a apelar a otra ala de la misma organización… entonces frente a los
delincuentes de estos trenes, busca defenderse ante la Fiscalía, y le hace un
llamado al Fiscal General, a Cabello, a
Maduro, pero si ellos forman parte de la misma organización. Hay que conocer al enemigo. Quienes actúan en
su contra es el Sistema en pleno: El Tren de Aragua, los pranes desde las cárceles,
la estructura de la Fiscalía y los actores policiales y además el silencio del
resto del sistema”.
Al final nuestro héroe se cansó de no lograr nada y después de soportar
una primera prisión por estar denunciando y volver con más fuerza en la denuncia pública a través de las redes, publicó un último video
esta vez triste, más
apagado en su voz, decepcionado y queriendo cerrando el ciclo. Lamentablemente era demasiado tarde y ya estaba sentenciado, condenado
a morir entre estos hermanos siameses que representan el Estado y las Bandas
criminales
Dejemos que sea el mismo Gabriel
que lo diga:
“Mi nombre es Gabriel Jesús
Sarmiento Rodríguez, C.I 27.654.015. Este video es para
decir públicamente que ya no estoy interesado
en pertenecer absolutamente a nada en el Estado (se refiere a su interés inicial de formar parte de los cuerpos de
seguridad del Estado manifestado en primeros videos). Me siento
decepcionado del Ministerio Público, del Fiscal Superior del Estado Aragua y de
todas las Instituciones Policiales. Vengo desde Abril paseándome por todas las
Instituciones Policiales, desde antes que me secuestraran. Y no hay manera que
se haga un escarmiento público. He sido objeto de vejaciones, burla, tanto de funcionarios como
de delincuentes. Nuevamente repito no soy un delincuente, no soy un malandro,
no pertenezco ni al Tren de Aragua ni al Tren del Llano, no quiero pertenecer a
ninguna institución, ni política, ni
estadal, ni gubernamental, ni nada. Soy
un civil más y le pido a las autoridades cese a todo acoso. Y le pido a Diosdado Cabello, a Tarew
William Sabb que me den el sobreseimiento
de mi causa y al terminar todo este proceso ya que soy totalmente inocente
voy a demandar al Estado con total propiedad por las vejaciones que me han
hecho las personas del Estado…No puede ser que yo tenga que hacer tanta bulla, tanto
revuelo para que ustedes me ayuden. Que
están esperando, prácticamente que vengan y me maten, que me maten, eso es lo
que están esperando. Yo sinceramente a los delincuentes que he nombrado en
mis videos, el niño guerrero, Johan
Petrica, la gente del Tren de los Llanos, no les tengo miedo, pero ya basta. Yo soy un civil, un programador, un analista de Civer Seguridad y lo único
que pido es que me dejen en paz. Lo único que quiero es tener una esposa,
un trabajo, poder caminar por las calles de la ciudad sin tener problemas con nadie. Soy un ermitaño, no
salgo de mi casa y cuando salgo es por algo puntual, voy al Ministerio a una
presentación, a comprar comida. (…) Me
están acosando tanto delincuentes como funcionarios. No quiero irme de mi país,
soy de Aragua, quiero hacer mi vida en este Estado, quiero morir aquí. La gente
me acosa para que me vaya del país y no quiero irme del país. Soy un patriota más, para así decirlo.
No quiero pertenecer a ninguna institución ´porque no están haciendo lo
correcto, no va con mis valores, ni tampoco soy malandro porque yo no robo no
extorsiono, no hago nada de eso. Entonces por favor como civil, como
ciudadano a las personas que me puedan ayudar se los agradezco, se los suplico.
Y a todos los que han estado pendiente, han estado pendiente, han estado
compartiendo mis videos, han compartido conmigo los live, agradecidos
totalmente con todos”.
Este segundo video es más esclarecedor. Estamos frente a un joven que
estaba pidiendo a gritos ayuda, protección, resguardo de
su integridad personal y física. Pero me hago una pregunta ¿Quién se la podía
brindar? Con el estado de deterioro de
nuestras instituciones de toda índole. Allí ha debido intervenir alguna institución
social pertinente que atendiera su caso, lo protegiera y le brindara
orientación. Pero ni siquiera de la
misma sociedad civil ni de sus seguidores pudieron entender su reclamo. Todo está tan decadente, cada quien ocupado
en lo suyo en esta anomía social. Ese lado humano es doloroso, pone a
pensar a donde hemos llegado. La palabra
solidaridad me suena desconocida. Al final pago con su vida su osadía, su
temeridad, su valentía, su inocencia, su incomprensión de comprender la
naturaleza del enemigo.